Fuente: Carlos Eduardo Rodriguez
miércoles, 8 de marzo de 2017
martes, 7 de marzo de 2017
Una experiencia rayada.
Hace un tiempo tuve la oportunidad de ir las Islas Caimán, uno de los paraísos fiscales mas increíbles del Caribe. Alli, ademas de hacer un poco de turismo, tuvimos la oportunidad de hablar con una señora muy amable de origen nicaragüense; ella nos contó que la presencia de venezolanos había incrementado en los últimos 3 años y que su propósito en la isla no era solo turismo, sino gozar de los privilegios que se tienen en un paraíso fiscal. En fin, en este pequeño relato el beneficio de la duda probablemente le dara a entender lo que yo entendi.
Como se podran imaginar, obviamente yo no fui a hablar de paraisos fiscales ni evasion de impuestos y mucho menos blanqueamiento de capitales, sino, a turistear con mi familia. Al llegar al muelle principal, infinidad de empresas de turismo y personas encargadas de hacer de tu estadia un placer te esperan para ofrecerte el mejor servicio al monto mas alto que te puedan ofrecer; claramente, tienes que negociarlo o podrias dejar la 1 año de salario en una excursion de 4 horas.
Mi cumpleaños era ese dia, converse con mis papas y les dije que queria hacer la excursion de las mantarrayas; por ser ese dia accedieron y fuimos todos a la excursion.
Mi mama, miedosa a morir, no queria entrar, por lo que decidi cargarla a ella y a mi hermanito para que se metieran porque ir a ese sitio no es algo de todos los fines de semana. Mi papa, como siempre, se lanzo de primero y se salio de ultimo en la excursion; él disfruta todo al maximo.
La excursion es increible, te dicen que no levantes mucho los pies porque las rayas acostumbran a meterse entre las piernas (una sensacion muy extraña) pero al nadar puedes estar absurdamente cerca de ese animal que siempre te dijeron que es muy peligroso, sobre todo por la muerte de Steve Irwin (creo, el de Animal Planet)
Estuvimos alrededor de 2 horas en el agua, suena a mucho tiempo pero como al pasarla bien el tiempo pasa muy rapido. Realmente, se disfruta muchisimo, las rayas son un animal dosil (si les das comida) y poco peligroso si solo tratas de convivir con ellos.
Como se podran imaginar, obviamente yo no fui a hablar de paraisos fiscales ni evasion de impuestos y mucho menos blanqueamiento de capitales, sino, a turistear con mi familia. Al llegar al muelle principal, infinidad de empresas de turismo y personas encargadas de hacer de tu estadia un placer te esperan para ofrecerte el mejor servicio al monto mas alto que te puedan ofrecer; claramente, tienes que negociarlo o podrias dejar la 1 año de salario en una excursion de 4 horas.
Mi cumpleaños era ese dia, converse con mis papas y les dije que queria hacer la excursion de las mantarrayas; por ser ese dia accedieron y fuimos todos a la excursion.
Mi mama, miedosa a morir, no queria entrar, por lo que decidi cargarla a ella y a mi hermanito para que se metieran porque ir a ese sitio no es algo de todos los fines de semana. Mi papa, como siempre, se lanzo de primero y se salio de ultimo en la excursion; él disfruta todo al maximo.
La excursion es increible, te dicen que no levantes mucho los pies porque las rayas acostumbran a meterse entre las piernas (una sensacion muy extraña) pero al nadar puedes estar absurdamente cerca de ese animal que siempre te dijeron que es muy peligroso, sobre todo por la muerte de Steve Irwin (creo, el de Animal Planet)
Estuvimos alrededor de 2 horas en el agua, suena a mucho tiempo pero como al pasarla bien el tiempo pasa muy rapido. Realmente, se disfruta muchisimo, las rayas son un animal dosil (si les das comida) y poco peligroso si solo tratas de convivir con ellos.
Stingrays in Stingray City / Mantarrayas en Stingray City
Autor: Gerardo Ochoa Vargas. 18/01/2009
El desafío de nadar con mantarrayas en Gran Caimán
Gran Caimán. 9 dic. (elmundo.cr) – Descubierta en 1503 por Cristóbal Colón, la Isla Gran Caimán es apenas reconocible en el mapa.
Esta isla localizada en el Mar Caribe y ubicada a 41 horas desde Puerto Limón (Costa Rica), es hoy, famosa por sus casi 600 bancos y sus centros financieros; sin embargo, más allá de todo esto, Gran Caimán es un paraíso turístico natural.
A primera entrada su arena blanca y fina, cautiva a los miles de turistas que llegan día a día.
Ante este escenario visitar la isla y no conocer el mundo subacuático es imperdonable, uno de ellos es nadar con mantarrayas.
Es por ello que el primer y único crucero en zarpar desde Puerto Limón: el Zenith, propiedad de la empresa costarricense Viajes Colón, lo lleva a éste lugar.
La excursión náutica es conocida como Stingray bay. Aquí, tras viajar casi 30 minutos en un catamarán, los turistas llegan en medio del mar, a un banco de arena donde viven las matarrayas.
Ahí, los turistas descienden del catamarán, al agua que llega por la cintura, y nadan con las mantarrayas, mientras estos le dan de comer calamares.
Y mientras esto ocurre, en George Town, la capital y principal ciudad de la isla miles de turistas disfrutan los comercios llenos de relojes, perfumes y joyería.
Todo esto, lo convierte en uno de los destinos que debe tomar en cuenta en sus próximas vacaciones.
Fuente: El Mundo-Costa Rica
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